Un restaurante es un lugar de mucho trajín, chef, cocineros y personal de sala entrando y saliendo… En este entorno una puerta automática que conecte cocina y sala es casi una herramienta imprescindible. Y una solución sencilla para disfrutar de esta ventaja es apostar por el montaje de un motor en la puerta batiente.
Rápido y sin obras
Uno de los temores de motorizar una puerta que está ya instalada es el tiempo que tardan las obras. En el caso del montaje de un motor en una puerta batiente no hay por qué preocuparse.
Los actuales kits de motorización son pequeños, discretos y fáciles de instalar. Por las características de las puertas batientes una parte del motor queda fijada en el marco o perfil de la puerta y la otra en la hoja.
En realizar esta operación se emplea poco tiempo y en un día o a lo sumo dos, si la puerta es muy grande o cuenta con más accesorios, todo queda en pleno funcionamiento. Rápido, sencillo y limpio.
Ventajas del montaje de un motor de puerta batiente
Las ventajas de la motorización de una puerta automática son evidentes, pero a pesar de ello conviene repasarlos.
El mayor de ellos de los beneficios es sin duda la comodidad. En un restaurante la rapidez en atender a los clientes es muy importante. Un servicio eficiente es la clave y para agilizar el paso de los camareros cargados con las comandas la ayuda de una puerta batiente automática es inestimable.
Además, no tener que manejar manualmente la puerta contribuye a incrementar la seguridad del personal. Se evitan situaciones comprometidas en las que se caen los platos y bandejas. La puerta batiente automática también puede incorporar un sistema anti colisión.
Otra de las ventajas de apostar por el montaje de un motor en una puerta batiente es que gracias a que la puerta nunca queda abierta se consigue separar los dos ambientes, preservando a la sala de los ruidos de la cocina y de los olores y humos. En resumen, una puerta automática mejora el aislamiento de zonas.
Sensor de movimiento
La clave para lograr esta eficiencia es comprar un sistema de motorización que cuente con un detector de movimiento. Así ante la presencia de cualquier persona se abre. Además, hay que recordar que los motores incorporan un regulador de velocidad de apertura para adaptarse a cada situación.