La reparación de puertas automáticas es aconsejable que sea realizada por personal cualificado. Profesionales que conozcan los mecanismos y procedimientos adecuados para subsanar cualquier fallo en el sistema de motorización de una puerta.
De lo contrario, una persona sin los conocimientos técnicos necesarios puede dañar sin querer algún automatismo y causar más problemas.
Lo que sí puedes hacer para la reparación de puertas automáticas
No obstante, sí hay ciertas cosas que se pueden hacer para contribuir a la reparación de puertas automáticas. Estamos hablando de fallos menores, pequeños problemas en los que se puede intervenir sin miedo a estropear un mecanismo más delicado y complejo.
Estas reparaciones están relacionadas con problemas como:
- Mal desplazamiento de la hoja de la puerta. En estos casos la solución suele consistir en engrasar las bisagras, rodamientos o piñones que forman parte de los mecanismos de apertura y cierre de la puerta. Presta mucha atención al tipo de aceite o lubricante que se emplea. Es mejor usar el recomendado por los expertos y en las cantidades adecuadas.
- Lubricar el motor. El motor de las puertas automáticas es recomendable engrasarlo cada 2 meses aproximadamente para asegurar un correcto funcionamiento. Ante un problema en el sistema puedes engrasarlo de nuevo, pero ten cuidado con la calidad del producto y las cantidades.
- Reparar la cerradura. Una de las cosas que se estropean con más facilidad es la cerradura. Revisa el pestillo y todo el sistema de la cerradura. A veces es solo que están sucias o tupidas.
- Comprobar los mandos a distancia y paneles de control. Los fallos en los paneles de control y mandos a distancias también son comunes. Comprueba las pilas o revisa el estado del cableado, pero si hay problemas mayores, avisa a un técnico.
La importancia de la limpieza
Aunque pueda parecer absurdo la limpieza es clave en la reparación de puertas automáticas. Con más frecuencia de la que creemos la suciedad acumulada en los raíles de las puertas automáticas puede entorpecer su correcto funcionamiento.
Limpia de manera periódica los alrededores de la puerta de arena, hojas, insectos y comprueba que los desplazamientos se realizan sin problemas.