La puerta de tu negocio es mucho más que el acceso al local, es el lugar que pone en contacto a tus clientes y potenciales clientes con tus productos y servicios. Por eso, es muy importante facilitar el acceso, y un motor de apertura de puerta para comercios te va a ayudar más de lo que crees.
Más accesibilidad
Una de las ventajas más evidentes de automatizar la entrada a tu negocio es la mejora de la accesibilidad. Disponer de un sistema de apertura automática va a hacer que los clientes entren con más facilidad, sobre todo los que tengan algún problema de movilidad o simplemente los que acuden cargados con paquetes, carros de bebés…
Por otro lado, contar con una puerta automática con sensor de proximidad te va a ayudar a eliminar la barrera arquitectónica que es una puerta. Puede parecer absurdo, pero realmente tener una puerta física entre cliente y tienda es un freno que disuade de pasar. La apertura de la puerta actúa como una invitación a entrar, a dejar atrás las reticencias y explorar qué te ofrecen.
Un motor para cada puerta
Para un óptimo funcionamiento de una puerta automática es esencial elegir el motor adecuado. Hay que tener en cuenta las dimensiones de la puerta y el peso, el número de hojas y otros factores como el volumen de tránsito.
Con estos datos se puede elegir la potencia precisa, sin quedarse cortos ni pasarse. Algo, por cierto, bastante habitual, porque se cree que a más potencia mejor funcionamiento y no es así, solo es desperdicio de energía.
Otro aspecto interesante al escoger el motor de apertura de una puerta es el ruido. Aunque la mayoría de los nuevos kit de automatización son silenciosos, para ubicaciones donde el silencio es fundamental hay opciones especiales.
Por último, hay que destacar que los automatismos incluyen gran variedad de prestaciones desde regulador de velocidad de apertura, retenedores, topes fin de apertura y distintos sistemas de cierre para garantizar la seguridad.